Cómo gestionar y evitar lesiones comunes en bicicleta
El ciclismo es una forma popular de mantenerse en forma y desplazarse, con numerosos beneficios para la salud. Sin embargo, mantenerse en plena forma puede ser impredecible. Un día te sientes genial, pedaleando con fluidez, y al día siguiente puedes sufrir molestias y dolor.
Conocer las lesiones típicas del ciclismo, cómo tratarlas y cómo prevenirlas puede ayudar a los ciclistas a mantenerse sanos y seguir disfrutando del paseo.

Recuerda que tu cuerpo está interconectado; los síntomas pueden ser engañosos, por lo que es importante consultar a un profesional como un fisioterapeuta o un osteópata si tienes una lesión persistente. Ellos pueden ayudarte a encontrar y tratar la causa raíz.
LESIONES POR IMPACTO
Las lesiones por impacto suelen producirse al caerse o chocar contra algo. Su gravedad puede variar desde rasguños leves hasta fracturas graves y traumatismos craneoencefálicos. Algunas lesiones comunes por impacto incluyen:
Erupción en la carretera: La lesión más molesta, aunque menos grave, que se produce en un accidente es la abrasión por fricción con el asfalto. Ocurre cuando la piel se raspa contra el pavimento. El tratamiento consiste en limpiar bien la herida para prevenir infecciones, aplicar una pomada antibiótica y un apósito, y mantenerla limpia y seca durante unos días para que cicatrice.

Fracturas: Las clavículas se fracturan con frecuencia en ciclistas debido a que suelen caer sobre las manos extendidas. Lo bueno es que generalmente sanan en unas seis semanas. Durante la recuperación, puedes seguir usando un rodillo de entrenamiento.
Lesiones en la cabeza: Las lesiones en la cabeza, como las conmociones cerebrales, pueden ocurrir si la cabeza de un ciclista golpea el suelo. Las conmociones cerebrales requieren reposo prolongado, incluyendo tiempo alejado de las pantallas. Usar un casco que ajuste bien es la mejor manera de prevenir estas lesiones.
DOLOR EN LA ESPALDA BAJA
Pasar horas encorvado sobre el manillar es una de las principales razones por las que los ciclistas suelen sufrir dolor lumbar. Este problema se agrava porque muchos tenemos trabajos que implican estar mucho tiempo sentados e inclinados frente a la pantalla del ordenador, lo que lo hace aún más frecuente.

Prevención:
En la posición de la bicicleta: Si adoptas una posición muy agresiva con una potencia larga y un manillar bajo, considera elevarlos para reducir la presión.
Postura fuera de la bicicleta: Si trabajas sentado en un escritorio, presta atención a tu postura. Asegúrate de que tu postura no te obligue a adoptar posturas incómodas y de que tu silla sea cómoda.
Fuerza central: Unos músculos centrales débiles pueden provocar dolor lumbar al montar en bicicleta. Fortalecer el tronco no solo ayuda a prevenirlo, sino que también aumenta la potencia general al proporcionar una base más sólida para las piernas. ¡Todo son ventajas!
DOLOR DE RODILLA
Las articulaciones de la parte superior e inferior de la pierna pueden dislocarse si algo las tira en la dirección incorrecta o si no se mueven correctamente.

Tratamiento:
Descanso y hielo: Es beneficioso reposar la rodilla y aplicar hielo para reducir el dolor y la inflamación.
Estiramiento y fortalecimiento: Realizar ejercicios que estiren y fortalezcan los músculos que rodean la rodilla, como los cuádriceps, los isquiotibiales y los músculos de la cadera, puede aliviar eficazmente el dolor.
Medicamentos antiinflamatorios: Se recomiendan los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) para ayudar a controlar el dolor y reducir la inflamación.
Fisioterapia: La consulta con un fisioterapeuta permite realizar ejercicios y técnicas personalizados que abordan las causas fundamentales del dolor de rodilla.
Prevención:
- Asegurarse de que la bicicleta esté correctamente ajustada a su cuerpo evita tensiones innecesarias en las rodillas.
- Es fundamental evitar movimientos excesivos de las rodillas manteniendo una técnica de pedaleo adecuada.
- Incrementar gradualmente la intensidad y la duración de tus sesiones de ejercicio ayuda a prevenir lesiones por sobreesfuerzo.
- Incluir actividades de entrenamiento cruzado en tu rutina ayuda a minimizar el estrés repetitivo en las rodillas.
DOLOR DE MUÑECA, BRAZO, MANO Y CUELLO
Las molestias en el cuello y las muñecas suelen deberse a una presión excesiva transmitida a través de la parte superior del cuerpo. Lo ideal es que aproximadamente el 60 % del peso corporal se distribuya hacia la parte trasera de la bicicleta, y el 40 % restante hacia la parte delantera. Si se ejerce demasiada presión sobre el manillar, puede provocar tensión en los brazos y las muñecas.
Por lo tanto, es fundamental asegurarse de que la distancia al manillar no sea excesiva y que este no esté demasiado bajo. Un manillar demasiado bajo también puede provocar dolor de cuello, ya que el ciclista puede verse obligado a estirar demasiado el cuello para mirar hacia arriba y ver la carretera.
Las molestias en las muñecas pueden aparecer cuando la posición del manillar fuerza un ángulo antinatural. Aflojando los tornillos de la potencia y ajustando la posición del manillar y las manetas, puedes aliviar este problema; girar el manillar hacia arriba puede ayudar a reducir ligeramente la distancia al manillar.
Prevención:
Elegir manillares compactos o de poca caída puede minimizar el alcance necesario al circular en la posición baja, ofreciendo una solución viable para aliviar la presión.

Los guantes y manoplas de ciclismo incorporan secciones acolchadas diseñadas para prevenir la compresión nerviosa. Sin embargo, si el entumecimiento persiste, es necesario consultar con un médico para evitar posibles lesiones crónicas.
PIE CALIENTE
El síndrome del pie caliente, también conocido como metatarsalgia, es una sensación de ardor en la planta del pie causada por la presión sobre los nervios entre los huesos metatarsianos. Suele producirse por el uso de calzado inadecuado, una mala posición de los tacos o el sobreesfuerzo.
Prevención:
- Verano: Si se te hinchan los pies en verano, afloja los zapatos si es posible o busca zapatos que permitan una mayor ventilación.
- Invierno: En invierno, los calcetines gruesos pueden restringir la circulación sanguínea en los pies. Opta por calcetines más finos y cálidos o considera usar zapatillas de ciclismo más anchas.
- Colocación de los tacos: Comprueba si las botas de fútbol distribuyen la presión de forma uniforme por todo el pie. Algunas botas con plataformas más grandes pueden ayudar.
- Dolor en la parte externa del pie: El dolor en la parte exterior del pie podría indicar la necesidad de una mejor sujeción en la plantilla. Las plantillas personalizadas se adaptan a la forma del pie, corrigiendo problemas como el dolor de rodilla causado por una mala alineación del pie.
El ciclismo es excelente para mantenerse en forma, pero es importante conocer las lesiones comunes y cómo prevenirlas y tratarlas. Un buen ajuste de la bicicleta y el equipo adecuado, como un computadora para bicicleta y monitor de frecuencia cardíaca, y una rutina de entrenamiento equilibrada son clave para reducir los riesgos de lesiones.


